#Queburrada:
Hace tiempo que venimos oyendo hablar del concepto de empresa abierta, una nueva forma de entender las relaciones humanas en las organizaciones con la premisa de cierta horizontalidad. Muchos son los que se llenan la boca de hablar de empresa abierta pero no todos aplican esa filosofía en sus propias organizaciones. Estos días hemos tenido la suerte de poder rebuzznar en nuestro proyecto del Grupo L’Àgora desde el mismo sitio, compartiendo no sólo espacios sino vivencias y hablando mucho con los trabajadores, al fin y al cabo, comunicándonos. Hemos podido pasear por la fina línea que separa el trabajo del ocio en un ejercicio de funambulismo propio de la filosofía rebuzzna. Esta empresa tiene un director, un gerente, un jefe, una persona en la cúspide de la misma directamente proporcional a su inversión personal en este proyecto. Tiene a su cargo apenas diez trabajadores pero no por debajo de él, sino a su lado. Y digo a su lado porque son trabajadores que participan de la filosofía de la empresa, el gerente sabe delegar en ellos y darle la necesaria flexibilidad que requiere la vida y al mismo tiempo ellos saben responder con voluntarismo y entrega. Un empresario que sabe escuchar y tiene sentido de la autocrítica, unos trabajadores que saben tomar decisiones y atender al cliente como si fuera su negocio y todo ello no exento de problemas y de encuentros y desencuentros, pero siempre desde el máximo respeto, siempre poniendo por delante el elemento humano. Para nosotros, para Rebuzzna, esto es un ejemplo de empresa abierta, un establo sin cercado donde cada uno sabe hacer su trabajo para hacer, entre todos, un lugar más agradable para vivir.
Esta misma filosofía la aplicamos en nuestra empresa. Rebuzzna es también un establo sin cercado, donde colaboramos con muchos compañeros horizontalmente porque valoramos el compañerismo y la cooperación abierta, porque cada individuo y profesional con el que unimos fuerzas, tiene mucho que aportar y nosotros le regalamos la confianza recíproca . Ambicionamos funcionar con proyectos que nos llenen, que nos resulten atractivos y gratificantes, pero también ambicionamos un entorno de trabajo amable y divertido, donde la productividad se base en la confianza y el compañerismo.
Compañerismo
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